Dreams in the city [priv. Yuka, Summer]

Los dias pasaban y yo sin mucho que contar, gracias al amuleto que habia fafricado mi madrasta no me podria en contrar tan facil, pero este estaba apunto de ceder y no tenia ni idea si el mismo metodo funcionaria dos veces, caminaba por los pasillos de la escuela casi decierta despues de clases y bajo la luz del ocaso me diriguia hacia la azotea, si mi sello se romperia pronto preferiria que no molestara a nadie mi batalla con la mujer de mi padre.

Me pare al raz de la reja que me dividia de una muerte segura y miraba el horizonte con el sol escondiendose, lleve mis manos a mi pecho y dije en voz baja -No me abandones esta vez, dios, quiero seguir con esta vida tranquila, no me dejes sola- resaba al aire, esperaba que de menos esa vez mis palabras fueran escuchadas.

¿Por qué a mi? era todo lo que quería saber, tenían estudiantes de mayor rango ¿no? yo no había terminado de poner medio pie en la academia cuando el director me asigno esta tarea con abundante regodeo sobre si mismo, como si de un festejo se tratara. "¿Estas de acuerdo Wayland?" Fue su frase, ante la cual yo no pude hacer más que agachar la cabeza con un notable sonrojo y asentir, aceptando así la tarea.

Solté un pesado suspiro, así empezaba mi primer día en la prestigiosa academia de la Vera Cruz así como mi futuro como exorcista, claro que no conocía el lugar,por el momento, solo sabia el camino a la oficina del excéntrico director y eso era ya mucho decir. "Nos encargaremos de tus cosas, no queda mucho tiempo, deberías irte si aun quieres alcanzarle" decía de forma despreocupada mientras se miraba y acicalaba las uñas, no hice más que salir corriendo hacia el lugar indicado.

El imponente sol comenzaba a ponerse, pintando los cielos de colores cálidos tales como el naranja y ciertos tonos de amarillo, el lugar al que me dirigía era una escuela común y corriente de la zona, tenia que buscar a una tal "Yuka Kurayami", ¿por qué? ni siquiera yo lo sabía...

Al llegar al lugar varios de los alumnos salían con dirección a sus casas, estaba en problemas, si la chica se había ido...¿Qué cara le iba a poner al señor Mephisto? para mi mala suerte, tampoco tenia pista alguna sobre como lucia la chica, por lo que no tuve más remedio que empezar a preguntar entre todos los que salían del edificio hasta que uno de ellos me dijo que la había visto subir a la azotea.

Subí tan rápido como pude y abrí la puerta que conducía a la azotea de golpe, respirando de forma un tanto entrecortada por la carrera que había pegado. Tal como el chico me había dicho, en el techo se encontraba una chica de cabello negro y ojos color sangre, aun así no estaba segura si era la Kurayami que buscaba...tome una bocanada de aire, tratando de armarme de valor para poder sacar unas miseras y entrecortadas palabras de mis labios-¿T-tú...tu eres K-k-kurayami?-dije mirándola con un leve sonrojo...

Un ruido un poco fuerte fue lo que me saco de mi meditacion y de mis rezos al que al paecer me abandono desde mi nacimiento, baje las manos de mi pecho y voltee a mis espaldas con gran rapides, temia que aquella persona me ubiese encontrado de nuevo pero lo que vi frente ami fue a una chica con un parche en el ojo y cabello negro corto, no perecia estudiante de la escuela pues llevava un atuendo que no reconocia; la intriga se hizo de mis pensamientos al escuchar a la chica preguntar si era yo, bueno si "Kurayami" era mi apellido, un poco extrañada acenti con la cabeza -Si lo soy... ¿quien eres tu? no pareces ser estudiante de aqui, tampoco reconosco tu rostro ¿te heri de alguna manera?- dije mientras recordaba alas tantas de personas que habia lastimado para poder vivir como lo hacia a hora, tenia la esperanza de que la chica me dijera que no era de ese modo y que solo se abia perdido; pero al saber mi nombre sospecho que ese no era el caso, el viento comenzo a soplar con mas fuerza y llevava mi cabello suelto con el como si jugara, descubri mi rostro para ver mas detenidamente a la chica esperando su respuesta.

Una sensación de alivio me invadió cuando confirmo que se trataba de la persona que buscaba, ahora era cuestión de regresar con ella a la academia y asunto resuelto. Por otro lado una de las preguntas que me había hecho me llamo singularmente la atención, ¿herirme? pero si nunca la había visto en mi vida...Tal vez me confundía con alguien, di por hecho que así era y me dispuse a responderle.

-M-mi nombre es S-summer...Summer Wayland-dije bajando la mirada al suelo mientras retorcía nerviosamente el borde donde terminaba mi suéter-S-oy estudiante de la academia de la Vera Cruz...etto...y pues...necesito que vengas conmigo...

La miraba de forma nerviosa, esperando su respuesta, debía ser extraño que alguien llegara de la nada y te pidiese acompañarlo, así, sin razón aparente, una respuesta lógica seria un rotundo "No", era lo que esperaba de la chica, si eso sucedía entonces ¿que hacia yo?

Su nombre era Summer decia venir de la academia de la Vera Cruz era la organisacion de la cual abia copiado el amuleto que me respaldaba en contra de mi madrastra me pidio que fuera con ella me extrañe aun mas -¿por que razon?, no conosco a nadie de la vera cruz, pero...- pense en el amuleto que estaba apunto de romperse y recorde el ritual de exsorsismo que vi del cual saque mi proteccion -Nesesito una nuva proteccion y me intriga tu visita... te acompañare, no quiero morir cuando mi amuleto se rompa- le dije a la chca frente a mi, sonrei como era habitual -¿podrias mostrarme el camino?- dije cortesmente.

No entendía nada de lo que decía, cada palabra que salia de sus labios no hacia más que confundirme aun más, solo tenia una cosa en claro, no era una chica en su totalidad normal... de ese amuleto dependía su vida o al menos algo así había dicho, esto al menos me aclaraba la razón por la que tenia que buscarle, seguramente el Director Mephisto quería asegurarse de que estuviese a salvo ¿o tal vez no?

La voz de la chica me saco de mis pensamientos sobre el por que estaba aquí o el porque ella necesitaba protección. Le sonrei tímidamente de vuelta, asintiendo ligeramente con la cabeza-Si-sígueme...-murmure antes de darme la vuelta, proponiéndome bajar las escaleras y salir de la escuela hacia las calles de la ciudad.

No dije una palabra en el transcurso del trayecto hacia la entrada de la escuela que daba a la calle, quería hacerle muchas preguntas, la curiosidad me mataba pero...seria maleducado, ademas de que no era como si tuviese el valor como para preguntar algo. Suspire resignada y continué caminando en silencio, mirando ocasionalmente de reojo para revisar si aun me seguía...

Mira nostalgicamente a mis espaldas al ver como la escuela se hacia mas paqueña, suspire, sin duda regresaria, o de menos esas eran mis intenciones, segui en silencio a la chica que se habia precentado frente a mi y cada que volteava a ver si aun le seguia, yo simplemente sonreia, escuche el sonido de lago quebrandose pero no le tome importancia y continue detras de la chica, hasta que por fin se quebro el emuleto que me proteguia, antes de prenderme en las llamas de mi padre corri a un lugar desolado y lo unico que encontre fue un amplio parque, me oculte detras de unos arbustos lejos de la avenida y mi alrededor se tiño con una luz morada, eran mis llamas; no tardaria mucho en llegar mi perseguidora por lo que solo trate de sofocar las llamas para despues defenderme con todo lo que tenia aunque por el desperdicio de energuia que habia sufrido por la salida subita de mi llamas estaba un poco devil.

Y lo inevitable llego, la figura de mi madrastra se mostro ante mi pero delante de ella salieron miles de demonios de clase baja como si fueran sus perros de caza me rodearon dejandome sin escapatoria -Vaya que eres escurridisa querida, solo deviste morir ese dia y no sufririas tanto- decia de manera altanera, comenze a sudar en frio -Si ubiese muerto ese dia usted no tendria en que entretenerse, a demas se me hace increible que teniendo casi todo el Gehena no pueda matar a una hibrida como yo; soy una mocosa no un soldado-dije un poco confiada, el miedo me carcomia por dentro pero no devia mostrarselo o moriria ¿que hacer?, novata contra desquisiada no sabia que hacer.

Caminamos en silencio un rato más, pasábamos cerca de un parque algo solitario, si seguíamos caminando a este ritmo estaríamos cruzando el puente hacia la academia en unos 20 minutos más o menos, empezaba a comprender por que me habían escogido a mi para todo esto, era una misión sencilla, es más no estaba segura de que entrase en el termino "misión" era más bien, algo así como un recado. Hacia buen clima, a decir verdad era una tarde agradable, esto trajo a mi mente un recuerdo... suspire y sacudí la cabeza, no eran horas de estar pensando en todo eso, sabía de por más que a ella le hubiera molestado que le recordara tan a menudo.

Escuche algo quebrarse, por un momento pensé que alguna de las dos había pisado algo, por reflejo mire al suelo y al no encontrar nada dirigí la vista hacia Kurayami. No pude más que verla unos segundos antes de que saliera corriendo hacia el desolado parque-¡Oye espera!-Me ignoro por completo, ¿qué pasaba? no tenia opción, sin pensármelo dos veces salí corriendo tras ella. El ojo comenzaba a molestarme conforme avanzaba, desee con todo mi ser que no tuviese nada que ver con ella...

Me frene de golpe cuando mi vista confirmaba lo que el ardor de mi ojo izquierdo me había advertido. Ella estaba rodeada de cientos de demonios de clase baja, estos parecían comandados por una señora o mejor dicho, una Demonio de rango mayor.

Me temblaban las piernas, no era como si pudiese hacer algo ¿o si? era solo una exorcista de clase baja, ¡ni siquiera había tomado mi primera clase aun! ¿¡cómo se suponía que manejara esto!? Pero... tampoco era como si fuese a dejarla sola...

Tome una piedra del suelo y antes de que pudiese ser frenada por mi insistente sentido común lance la roca,esta golpeo justo la cabeza de la que parecía ser la jefa...trague saliva ¿enserio acababa de hacer algo como eso? ¿a-ahora qué?

Las cosas se tornaron mas complicadas cuando la chica que me guiaba entro a escena al parecer buscaba ayudarme, pero con solo una roca no seria capaz de hacerle daño a la desquisiada que deseaba mi muerte a toda costa, con algo de trabajo logra sacar unas llamas de mis manos y esparsirlas a mi alrededor, pero aun me costaba un poco controlarlas, asi que el hecho de hacer una delimitacion en mi estado actual era muy exigente para mi, pero aun asi me logre desaser de la mayoria de los pequeños demonios que me rodeaban -vamos dame algo mejor...- dije de manera altanera, si algo habia aprendido es que no deveria mostrarle miedo a una persona como ella o seria mi fin; mire a la chica detras de ella y le hize señas para que huyera -al parecer ella no es solo una persona desafortunada; la conoces ¿no?Yuka- me mantube en silencio, ella habia lastimado a la mayoria de las personas que me conocian con el fin de hacerme sufrir, ella sin duda no seria la exsepcion -No se quien es, solo me siguio--pero aun la quieres salvar, eso basta para mi- comenze aterrarme,no queria vivir lo mismo como si fuese un circulo vicioso, mis emociones hizieron surguir mas llamas al rededor de mi cuerpo lo que hizo que se delimitara una linea entre ella, quien avanzaba acia la chica, y su victima -No... la... vas... a tocar- dije jadeante, la lucha por mi conciencia se hizo precente, ella solo sonrio -Eres tierna Yuka, pero esa amabilidad te va a matar, eres un deminio actua como tal, bueno aunque me conviene que protegas a los humanos- me moleste y subi la voz tanto como lo daban mis cuerdas vocales -!SOY HIBRIDA¡ no... me compares... contigo- cai al piso de rodillas; solo deveria prenderla por un momento y sin duda retrosederia pero ya no podia hacer nada ni siquiera moverme seria posible.

Todo estaba pasando muy rápido, demasiado rápido y yo parecía estar completamente paralizada, dudaba seriamente el hecho de que siquiera siguiese respirando por mi cuenta, sentía un sudor frío recorrer mi cuello, mis rodillas amenazaban con desplomarse en cualquier momento. De un momento a otro estaba frente a una pelinegra envuelta en llamas violetas, quien con estas mismas había eliminado a la mayor parte de los demonios pequeños, de igual forma me acaba de meter en algo que probablemente no podría manejar...Era obvio que no le interesaba a la Demonio, esta estaba claramente tras Kurayami desde un principio, sin embargo, ella misma lo había dicho, el hecho de la pelinegra tuviese interés en mí me convertía de inmediato en su objetivo, a pesar de esto, el cuerpo no parecía responderme, a este paso me mataría, no...mejor dicho, nos mataría a ambas.

Antes de que la demonio se pudiese acercar más a mí una barrera de llamas violetas, iguales a las que envolvían a Kurayami. Después de esto reaccione de inmediato, busque a mi acompañante desesperadamente con la mirada, cuando la encontré estaba de rodillas en el piso, bastante pálida, con un aspecto terrible, como si fuese a desfallecer en cualquier momento y bueno, eso parecía ser un tanto posible.

Era algo más que obvio pero que lo gritara de esa forma...una híbrida, alguien con sangre impura corriendo por sus venas...sonrei levemente, tal vez era egoísta, tal vez era solo por que hasta cierto punto, llegue a reflejarme y por otro lado quería llegar a ser como ella...

Si ese era el caso...Por algo había que empezar, además ¿no había venido aquí para convertirme en una exorcista? ¿para ayudar a la gente y compensar el hecho de ser un riesgo? sí para eso estaba aquí, no podía ponerme a perder el tiempo, mucho menos con alguien en peligro...

Apreté los puños, poco a poco el muro de flamas violeta iban bajando su intensidad, no importaba, estaba lista...-¿H-humana? ¿u-una demonio como tú no puede diferenciar a una semidemonio de una humana? que pa-patética...-la voz me temblaba un poco a pesar de tratar de sonar altanera como lo había hecho Kurayami hacia unos momentos, respire hondo y mire fijamente a la demonio frente a mi. Retire el parche de mi ojo izquierdo completamente consciente de lo que pasaría bajo estas circunstancias, después de todo no lo controlaba por completo.

Una fuerte llamarada de color ámbar salia de mi ojo izquierdo, me alegro que no me envolviese por completo, significaba que podía controlar un poco mejor las llamas, aun así debía de mantenerme calmada tanto como me fuese posible si no quería perder el control. No espere a que ella hiciese el primer movimiento, tenia que ser rápida si quería acabar con esto lo antes posible. Lance hacia ella una flama que había logrado hacer en mi brazo, el movimiento había sido rápido y repentino, no tenia mucha oportunidad de esquivarlo considerando la distancia, sin embargo, aun era posible que lo hiciese...

La chica que habia venido por mi seguia mi ejemplo, al ser altanera y no demostrarle el miedo que sentiamos de menos no vendria con su forma original dandonos la esperanza de hacerla retroceder, solo tenia que prenderla en llamas y podria concentrarme en esconderme de nuevo lejos de esa ciudad, pero algo inesperado salio de los labios de la chica; hibrida, al parecer era igual que yo, se quito el parche del ojo y al parecer tenia las intenciones de hacer algo genial, los ojos se me iluminaron al imaginar que tipo de cosas podria hacer, pero para nuestra desgracia ella actuo primero -buscan oportunidad ¿no?, la manto decirles que no la tendran- dijo mientras se acercaba a mi y me tomaba de la solapa de la blusa del uniforme leventandome cerca de medio metro del piso y dejandome apenas el espacio para respirar -solo te busco a ti Yuka, te quiero muerta y lejos de mi camino- apreto con mas fuerza -y... yo  solo... busco vivir sin ti... no quiero el poder de mi padre... mucho menos la vida en el gehena... solo quiero vivir en paz...- tome sus manos y solte una leve llama para que me soltara, pero no tubo efecto y solo precionaba mas para asficxiarme, funcionaba muy bien, mi fragil conciencia se hacia mas tambaleante.

Me mordí el labio, había fallado y ahora tenia a Kurayami en sus manos, ella estaba débil y no lograba soltarse de su agarre, comenzaba a ponerme nerviosa, sentía como las llamas que salían de mi ojo comenzaban a agitarse también. Tenia que actuar rápido, atacar con flamas parecía no ser muy efectivo sin mencionar que podia lastimar a la pelinegra por error, sin el parche era mucho más hábil físicamente...

Suspire, "Me odiare por esto" fue lo que paso por mi mente segundos antes de empezar a correr hacia aquella que ahora tenia a Kurayami entre sus manos, salte y la empuje con toda mi fuerza, la había envuelto con los brazos, como si la abrazara solo para que no pudiese esquivar fácilmente, así las tres terminamos en el suelo.

-¡Yuka!-grite con desesperación, quería que se alejara, tenia una leve oportunidad ahora que había cierta confusión por todo, una vez que ella estuviese lejos del alcance de la demonio podríamos huir, una vez en el puente de la academia habrá exorcistas que ayudarían...

senti cuando cai al piso por la accion que la chica que me acompañaba habia hecho, tosi un poco tratando de recuperar el aliento y despues vi la escena un poco perturvadora aquella chica tenia flamas en su ojo, cuando grito mi nombre por impulso me aleje un poco de ellas rodando hacia la direccion contraria pues no tenia la fuerza suficiente para levantarme; note como unas llmas que me envolvian se desprendian de mi cuerpo dejando un rastro y dudando que lo que intentaria funcionara aun asi lo intente, coloque mis palmas en el piso e intensifique las llamas en el piso haciendo que la parte frontal de la demonio se prendiera con mis llamas purpuras, tube de nuevo el bajon de energuia y casi caigo esta vez-co... rre...- dije entre cortando a la chica que la sostenia por la esopalda solo era cuastion de tiempo para que la proyeccion se fuera ahora solo deveria ingeniarmelas para no ser detectada por un rato.

¿Por qué no se levantaba? ¿Estaría lastimada? En estos momentos pensar en la respuesta podia costarme bastante caro, odiaba actuar sin pensar, era bastante torpe y cuando hacia algo así por lo regular terminaba en desastre, pero en esta situación no era como si tuviese tiempo para pensar que o no hacer. Fue cuando escuche el entrecortado grito de Kurayami, p-pero si corría soltando a la demonio, ¿no iría tras nosotros? por otro lado, mi compañera no tenia forma de huir, ni siquiera parecía ser capaz de mantenerse de pie. Chasquee la boca, me estaba tardando demasiado en hacer lo que sea que fuera a hacer.

Las llamas que Kurayami intensifico nos daban una ligera ventaja. Me levante del suelo y corrí hacia ella tan rápido como me fue posible-¿E-estas bien?- pregunte claramente alterada mientras la levantaba dispuesta cargarla, era unos cuantos centímetros más alta que yo, así que la tarea era algo difícil más no imposible, sin mencionar que justo ahora era mucho más fuerte de lo normal. 

Una vez que la tuve en mi espalda empece a correr hacia la academia, no sabia si la demonio nos seguía o no, no quería voltear, me concentre solo en correr, en llegar a la academia pronto, estaba segura de que allí conseguiríamos ayuda o tal vez ni siquiera pudiese entrar con nosotras, de cualquier modo, era nuestra esperanza.

Senti como la chica me llevaba cargando y corria desesperadamente, no sabia a donde queria llegar con esta carrera y yo en relidad no podia ver muy claramente mas alla de medio metro -esta bien... de menos tengo media hora... para borrar mi exsistencia y paso... por este lugar... bajame... despues de todo no podre ir contigo... o te pondre en peligro sabia perrfectamente que mis palabras eran iracionales, probablemente ella era la unica que me podia sacar de esta, pero como siempre temia a ser la causa de la desgracia, deb esa manea estaria bieen, por mis llamas tenia tiempo suficiente de desvanecerme si estubiese en optimas condiciones obiamente no era era caso.