¡¿Todo desde cero?! Empezando con el pie izquierdo [Prvi. Aika]

Andaba por los pasillos de la academia, había llegado hacía a penas unos cuantos minutos, y bueno, me apetecía aprender bien donde estaban todos los lugares para no ser de esos que se pierden cuando tienen que ir a cualquier sitio. Curiosamente, el camino que mejor me había aprendido era el camino al despacho del director, por alguna razón, me daba la sensación de que ese camino lo iba a hacer unas cuantas veces más.

Después de un rato percorriendo los pasillos, casi me sabía la disposición de la academia de memoria, pero mejor darle un último repaso, a demás, era muy sorprendente todo lo que mis ojos llegaban a ver allí, nunca antes en mi vida había visto algo parecido a aquello, se notaba bastante que estaba hecha por gente rica para gente rica. Luego sentí que alguien se chocaba conmigo, me despisto un segundo y ya se chocan contra mi. Lo que me fastidió de verdad fue que me habló de mala manera diciendo que si no podía mirar al frente ¡y para colmo me llamó chico! Esto no lo podía permitir. Le miré de mala manera. Aquel era un chico unos 2 o 3 años mayor que yo, pero eso no me importaba ni un poquito -¡Caro que puedo mirar de frente, no fui yo la que se chocó, fuiste tú, pedazo de tonto! Y por cierto, como vuelvas a decir que soy un chico, te vas a meter en líos, yo soy una chica, y se nota bien, si no te diste cuenta no es problema mío, sino tuyo ¿acaso a ti te gusta que te llamen chica? Porque si es así es que eres tonto- sí, había dado un buen discurso, pero es que me enfurecía demasiado que se chocaran conmigo y que me echasen la culpa a mi, vale que sí había tenido mi parte de culpa, pero no lo admitiría. Suspire, no me apetecía que me castigasen el primer día, al menos hoy tenía que dar más o menos buena impresión esta bien, chico tonto, no me apetece discutir en medio del pasillo con todos viéndonos, a no ser, que por un casual quieras quedarte castigado. Yo soy Aika HIyama y quiero ser exorcista, por unas razones que no te pienso decir, pero se podría decir que es por venganza y odio hacia un miembro en concreto de mi familia ¿Tú cómo te llamas? Si quieres no me lo digas, pero si no sé tu nombre te seguiré llamando chico tonto y todo el insulto que se me ocurra en esos momentos, así que tú verás lo que haces le dije con cierto aire de superioridad, esta academia iba a ser más divertida de lo que me esperaba.

Primer día de clase, me había despertado ridículamente temprano y aun así todavía no sabia a donde iba... La escuela era ciertamente gigante, la ciudad en sí lo era, no esperaba una escuela pequeña pero eso no le quitaba lo impresionante. Pensé en todos los chicos del orfanato...¿tendrían siquiera la oportunidad de ver algo así en sus vidas? por primera vez me sentí "con suerte" por sobre ellos, claro que a un nivel completamente superficial, podría cambiar todo esto por sus vidas en cualquier segundo.

No sabía cuanto llevaba caminando, ni por donde había pasado y por donde no, la desesperación empezaba a atormentarme, e-el lugar era demasiado grande, y tenia que admitirlo, estaba completamente perdida, el problema es que tampoco me atrevía a preguntar por donde estaba el salón a nadie. Di un respiro y apreté los puños con decisión, le preguntaría a la siguiente persona que se cruzara en mi camino. Esa "siguiente persona" resultaron ser dos, una chica y un chico, parecían estar discutiendo sobre algo, tal vez lo mejor seria seguir de largo...No, debía preguntarles, sí o sí. Tome aire y me acerque a ellos, la chica estaba bastante, bastante enfadada, insultaba al chico y le gritoneaba varias cosas, entre ellas una que me llamo la atención ¿E-exorcista? no me extrañaba el hecho que lo fuese, si no que lo dijera así como así, después de todo, lo teníamos prohibido ¿no?, eso significaba que tal vez, la encontraría después en las clases especiales...Pero estaba olvidándome de lo que tenia que hacer-E-etto...¿¡Disculpen, saben donde esta este salón!?- dije tendiendo el papel ante ellos con el rostro mirando al suelo, este, adornado con una MUY notorio sonrojo, no había sido mi intención gritar, estaba bastante nerviosa y...no había podido controlarme después de todo, tal vez, llegar de esta manera con dos personas claramente enfadadas no habia sido el mejor "inicio de clases"

Miré al chico, al parecer se llamaba Rin. Asentí a lo que dijo -Está bien, no me apetece empezar el curso con peleas, olvidemos lo ocurrido, pero no me vuelvas a acusar de algo que no he hecho- al fin y al cabo, no parecía un mal chico.

En ese momento me di cuenta de que se me había escapado lo de que quería ser exorcista, pero por la reacción del chico, me di cuenta de que él también lo sería -Rin, no le digas a nadie nada de los exorcista a no ser que te quieras meter en líos, yo estoy segura de que me meteré en ellos, pero bueno, tú haz lo que te de la gana, tampoco voy a comportarme como tu mamá- le dije con aire de superioridad e indiferencia.

Luego apareció una chica preguntando si sabíamos donde está el salón -Pues no sé ni donde está mi habitación, así que no, no sé donde está el saló y... ¿por qué gritas? no estoy sorda- le dije mientras la miraba, no estaba sorda, escuchaba perfectamente.

-Ya que ninguno de los 3 sabemos donde está, lo mejor es ir a buscarlo, si alguien quiere preguntar, que lo haga, yo no pienso hacerlo- dije mientras los miraba a los 3 con gesto de superioridad, diciendo que yo era la que mandaba aquí. Me giré empezando a andar, me lo iba a pasar muy bien aquí, estaba segura.

Levante la mirada de forma algo brusca e hice una leve reverencia a forma de disculpa-L-lo siento no era mi intención gritarles...-dije aun sonrojada evitando cruzar mirada alguna con ellos, estaba bastante apenada por haberles hablado de esa manera, enserio no había sido mi intención. Me desanimo bastante que ninguno supiese donde estaba el salón, a este paso iba a llegar tarde irremediablemente.

La chica de ojos azules hablo de nuevo, con tono de superioridad, muy segura de si misma. Por sus palabras supuse que los tres iríamos en el mismo curso, pues al parecer ellos buscaban el mismo salón...Una sonrisa leve se formo en mis labios un par de segundos, tal vez no había sido la mejor forma de empezar a hablarles pero al menos, ya conocía a dos personas de mi curso, sumando a esto que por el momento al menos una de ellas también aspiraba a ser exorcista.

-Vale...-musite de forma prácticamente inaudible, más para mi misma que para los demás y empece seguir a la chica en silencio. No podia negar que estaba feliz, tal vez podríamos llegar a ser amigos... pero, por el momento ni siquiera sabia sus nombres, tal vez por eso debería comenzar.

-M-me llamo Summer...¿y ustedes?-dije sin mirar a ninguno de los dos, aun una simple presentación me ponía los nervios de punta...enserio me resultaba odiosa en ocasiones...